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Seguir a Jesús es sin duda alguna una de las decisiones más importantes y trascendentales que podemos tomar en nuestras vidas. No se trata simplemente de creer en él, sino de contar el costo de seguirle. En Lucas 14:28, Jesús nos insta a considerar detenidamente lo que implica ser su discípulo y a renunciar a todo para seguirle. En este artículo, exploraremos en profundidad la importancia de contar el costo de seguir a Jesús, qué significa realmente seguirle, los desafíos del discipulado radical, la incompatibilidad entre seguir a Jesús y aferrarse al mundo, la necesidad de contar el costo, los riesgos y sacrificios del discipulado, la vida transformada al seguir a Jesús, la entrega del control de nuestras vidas y la perseverancia en momentos difíciles.
La importancia de contar el costo de seguir a Jesús
Contar el costo de seguir a Jesús es un paso vital en nuestra relación con él. Nos permite evaluar sinceramente nuestras intenciones y motivaciones para seguirle. No se trata solo de un acto impulsivo o superficial, sino de un compromiso profundo que afecta todos los aspectos de nuestra vida. Cuando contamos el costo de seguir a Jesús, estamos preparándonos para lo que viene. Estamos dispuestos a enfrentar los desafíos y sacrificios que conlleva ser su discípulo. Es una manera de asegurarnos de que estamos dispuestos a renunciar a todo por amor a él.
¿Qué significa realmente seguir a Jesús?
Seguir a Jesús implica mucho más que asistir a la iglesia los domingos o creer en su existencia. Implica una entrega total y absoluta de nuestra vida a él. Significa hacer de él el Señor y Salvador de nuestras vidas, renunciando a nuestros propios deseos y agendas para seguir su voluntad. Jesús nos llama a negarnos a nosotros mismos, a tomar nuestra cruz y seguirle. Significa vivir una vida de obediencia y sumisión a su autoridad. No se trata solo de creer en Jesús, sino de seguirle activamente cada día.
Renunciar a todo: el desafío del discipulado radical
El discipulado radical es un llamado a renunciar a todo por amor a Jesús. Esto implica soltar nuestras metas y ambiciones personales, renunciar a nuestros propios deseos y placeres, y estar dispuestos a sacrificar cualquier cosa que pudiera impedirnos seguir a Jesús plenamente. Puede significar dejar atrás relaciones, posesiones materiales o incluso estilos de vida cómodos. No es fácil renunciar a todo, pero es un desafío que Jesús nos presenta como parte de seguirle.
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Convocación santa en la Biblia: su significado divinoLa incompatibilidad entre seguir a Jesús y aferrarse al mundo
Jesús deja en claro que no se puede seguirle y aferrarse al mundo al mismo tiempo. En Mateo 6:24, él declara que no podemos servir a dos señores, ya que amaremos a uno y odiaremos al otro. Seguir a Jesús requiere un desapego total de las cosas de este mundo y una entrega completa a él. Esto implica dejar de buscar la aprobación de los demás, renunciar a las posesiones materiales como la principal fuente de felicidad y encontrar nuestra satisfacción plena en la comunión con él. No podemos vivir una vida doble, tratando de mantener un pie en el mundo y otro en el reino de Dios. Debemos tomar una decisión clara y firme de seguir a Jesús y dejar todo lo demás detrás.
¿Por qué es necesario contar el costo de seguir a Jesús?
Contar el costo de seguir a Jesús nos ayuda a tener una comprensión clara de lo que implica ser su discípulo. Esto nos permite tomar una decisión informada y consciente de seguirle. Al contar el costo, estamos reconociendo que seguir a Jesús no siempre será fácil, pero que vale la pena. Nos prepara para los desafíos y nos ayuda a mantenernos firmes en nuestra fe cuando enfrentamos dificultades. Además, contar el costo nos ayuda a estar dispuestos a renunciar a todo por amor a Jesús y nos previene de caer en la tentación de aferrarnos al mundo.
Los riesgos y sacrificios del discipulado
El discipulado no es un camino de rosas. Hay riesgos y sacrificios involucrados. Seguir a Jesús puede resultar en la alienación de amigos o familiares que no comparten nuestra fe. Podemos enfrentar persecución y oposición por causa de nuestro compromiso con Cristo. Incluso puede requerir renunciar a nuestras comodidades y enfrentar situaciones difíciles. Sin embargo, los riesgos y sacrificios del discipulado se ven opacados por las recompensas eternas que obtenemos al ser fieles a Jesús.
Vivir de manera transformada: el cambio total de vida al seguir a Jesús
Seguir a Jesús implica un cambio radical en nuestras vidas. No solo nos adherimos a un conjunto de creencias, sino que somos transformados por el poder de su Espíritu Santo. Nuestras prioridades, valores y comportamientos cambian a medida que nos rendimos a su voluntad y permitimos que él guíe nuestras vidas. Ya no vivimos para nosotros mismos, sino para dar gloria a Dios y servir a los demás. Este cambio total de vida es evidencia de que hemos contado el costo de seguir a Jesús y estamos dispuestos a vivir de acuerdo a sus enseñanzas.
Tal vez te interesaCristo: La cabeza supremacía de la iglesia y su cuerpo unidoNo se trata de ganar la salvación, pero implica entregar el control de nuestras vidas
Es importante destacar que contar el costo de seguir a Jesús no se trata de ganar la salvación. La salvación es un regalo gratuito de Dios que recibimos por fe en Jesucristo. Sin embargo, seguir a Jesús implica entregar el control de nuestras vidas a él. Significa reconocer que él es el Señor y que queremos seguir su voluntad en todo momento. No podemos seguir a Jesús a nuestra manera, sino que debemos rendirnos a su autoridad y buscar su dirección en cada área de nuestra vida.
La perseverancia: seguir a Jesús incluso cuando las cosas se pongan difíciles
Seguir a Jesús no siempre será fácil. Habrá momentos en los que enfrentaremos dificultades, pruebas y tribulaciones. Sin embargo, la perseverancia es esencial en el discipulado. Jesús nos promete estar con nosotros en cada paso del camino y fortalecernos en medio de las pruebas. Debemos confiar en su gracia y poder para enfrentar los desafíos y continuar siguiéndole fielmente, incluso cuando las cosas se pongan difíciles. La perseverancia es una respuesta del corazón a su amor y fidelidad hacia nosotros.
Conclusión
Contar el costo de seguir a Jesús es una decisión seria y trascendental que debemos tomar. Implica renunciar a todo por amor a él y rendirnos completamente a su voluntad. Seguir a Jesús no es un camino fácil, pero es el camino que nos lleva a la vida eterna y a una relación íntima con nuestro Salvador. Es un camino de riesgos y sacrificios, pero también de recompensas eternas y una transformación radical de vida. Recordemos siempre contar el costo de seguir a Jesús y estar dispuestos a seguirle incluso cuando las cosas se pongan difíciles.
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