El arrebatamiento y su relación con la tribulación

El arrebatamiento y su relación con la tribulación es un tema sumamente apasionante y debatido entre los creyentes. ¿Qué es el arrebatamiento? ¿Cuándo ocurrirá? ¿Será antes, durante o después de la tribulación? Estas son algunas de las preguntas que han llevado a diferentes interpretaciones y posturas teológicas. En este artículo, exploraremos en detalle el concepto del arrebatamiento, las diferentes interpretaciones sobre su momento y nos enfocaremos en la posición del arrebatamiento pre-tribulacional, analizando sus fundamentos bíblicos y los argumentos a favor.

¿Qué es el arrebatamiento?

El término «arrebatamiento» se deriva del griego «harpazo», que significa «ser llevado por la fuerza». En contexto religioso, se refiere al evento en el cual los creyentes en Jesucristo serán llevados por Dios de manera sobrenatural, siendo transformados y reunidos con Él en el cielo. El arrebatamiento es descrito en la primera carta de Pablo a los Tesalonicenses, donde dice: «Porque el Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros, los que estemos vivos, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor» (1 Tesalonicenses 4:16-17).

Diferentes interpretaciones sobre el momento del arrebatamiento

Arrebatamiento pre-tribulacional

La posición del arrebatamiento pre-tribulacional sostiene que este evento ocurrirá antes de que comience la tribulación, la cual se refiere a un período de sufrimiento y aflicción sin precedentes en la historia de la humanidad. Según esta interpretación, los creyentes serán librados de la ira de Dios y protegidos durante la tribulación, siendo llevados al cielo para estar con el Señor.

Este punto de vista se basa en varias razones bíblicas y argumentos a favor. Primero, se argumenta que la tribulación es un tiempo de juicio y purificación para el mundo incrédulo y que los creyentes no deben experimentar la ira de Dios. En el libro de Apocalipsis, se menciona claramente que los creyentes serán librados de la ira que vendrá sobre la tierra (Apocalipsis 3:10).

El castigo de Dios al faraón por el engaño de Sarai (Génesis 12:17)

Además, se mencionan las promesas de Jesús de venir por su pueblo y llevarlos al lugar que ha preparado para ellos (Juan 14:3). Los defensores del arrebatamiento pre-tribulacional ven en estas promesas una clara indicación de que los creyentes serán llevados al cielo antes de la tribulación.

Promesas de Dios de librar a los creyentes de la ira y protegerlos durante la tribulación

Las Escrituras son abundantes en promesas de Dios de librar a los creyentes de la ira y de protegerlos durante la tribulación. Una de las promesas más citadas es la mencionada anteriormente en Apocalipsis 3:10, donde Jesús promete a la iglesia de Filadelfia: «Porque has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra».

Otra promesa significativa se encuentra en 1 Tesalonicenses 5:9, donde Pablo escribe: «Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo». Esta declaración es clara en su enseñanza de que los creyentes no han sido destinados a experimentar la ira de Dios, sino a recibir salvación a través de Jesús.

Relación entre el arrebatamiento y la tribulación

La relación entre el arrebatamiento y la tribulación es un tema de gran debate entre los estudiosos de la Biblia. Mientras que algunos defienden la posición pre-tribulacional, otros sostienen que el arrebatamiento ocurrirá en medio de la tribulación (arrebatamiento mid-tribulacional) o al final de la misma (arrebatamiento post-tribulacional).

Los que apoyan el arrebatamiento mid-tribulacional argumentan que los creyentes estarán presentes durante la primera mitad de la tribulación, pero serán protegidos y llevados al cielo antes del período de intensa aflicción conocido como la «gran tribulación». Sin embargo, esta posición encuentra menos apoyo bíblico en comparación al arrebatamiento pre-tribulacional.

Por otro lado, los partidarios del arrebatamiento post-tribulacional creen que los creyentes pasarán por la tribulación completa antes de ser arrebatados al cielo. Esta perspectiva se basa en el hecho de que Jesús prometió estar con sus seguidores hasta el fin del mundo (Mateo 28:20), implicando que los creyentes estarán presentes durante la tribulación.

El arrebatamiento y la esperanza de los creyentes en tiempos difíciles

La creencia en el arrebatamiento pre-tribulacional brinda una gran esperanza y consuelo a los creyentes en tiempos de dificultad y aflicción. Saber que serán llevados por Dios antes del comienzo de la tribulación y que serán protegidos de la ira de Dios les da confianza y paz en medio de las pruebas y sientan la certeza de que su destino final es estar con el Señor.

Esta esperanza se ve respaldada por versículos como Juan 14:1-3, donde Jesús dice: «No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis».

Dudas y debates en torno al arrebatamiento pre-tribulacional

A pesar de los argumentos a favor del arrebatamiento pre-tribulacional, existen dudas y debates en torno a esta posición. Uno de los principales puntos de crítica es la falta de evidencia explícita del arrebatamiento pre-tribulacional en las Escrituras. Aquellos que se oponen argumentan que el concepto del arrebatamiento pre-tribulacional es una interpretación más reciente y que no se encuentra claramente enseñado en la Biblia.

Además, algunos señalan que la idea de ser librados de la tribulación puede ser una perspectiva egocéntrica y que los creyentes deben estar preparados para enfrentar pruebas y dificultades en sus vidas. Argumentan que la tribulación puede ser una oportunidad de crecimiento y testimonio para los creyentes.

Conclusiones y reflexiones finales sobre el arrebatamiento y la tribulación

El arrebatamiento y su relación con la tribulación es un tema complejo y debatido entre los creyentes. Mientras que algunos defienden la posición del arrebatamiento pre-tribulacional, sosteniendo que los creyentes serán llevados por Dios antes de que comience la tribulación, otros sostienen posiciones diferentes, como el arrebatamiento mid-tribulacional o post-tribulacional.

Aunque hay diferencias de opinión, es importante recordar que nuestra salvación no depende de nuestra posición en relación al arrebatamiento, sino de nuestra fe en Jesucristo como nuestro Salvador y Señor. Independientemente de cuándo ocurra el arrebatamiento, podemos confiar en las promesas de Dios de protegernos y estar con nosotros en todos los momentos de nuestra vida.

En tiempos de tribulación y dificultades, podemos aferrarnos a la esperanza de que Dios tiene un plan y un propósito para cada uno de nosotros. Podemos encontrar consuelo en la certeza de que Él está en control y que su amor y cuidado hacia nosotros nunca cesarán.

En última instancia, lo más importante es vivir nuestra vida diaria en preparación para la venida de Jesús, sea cual sea el tiempo en que ocurra el arrebatamiento. Debemos estar vigilantes, fortaleciendo nuestra fe, compartiendo el amor de Cristo con los demás y viviendo en obediencia a su Palabra.

Fuentes consultadas y recursos adicionales sobre el tema

– La Biblia (Diversas versiones).
– «El rapto de la Iglesia» por John F. Walvoord.
– «Left Behind» por Tim LaHaye y Jerry B. Jenkins.
– «Understanding End Times Prophecy» por Paul N. Benware.