Jesús dijo muchas frases impactantes durante su ministerio terrenal, pero una de las más intrigantes es cuando advierte: «Nunca te conocí. Apartaos de mí». Estas palabras, pronunciadas por Jesús en el contexto de un pasaje bíblico, plantean preguntas sobre lo que realmente quiso decir con ellas y cuál es su significado para nosotros hoy en día.
El Contexto de las palabras de Jesús
Para comprender mejor el significado de esta frase, es importante examinar el contexto en el que Jesús la pronunció. Estas palabras se encuentran en el evangelio de Mateo, específicamente en el capítulo 7, versículos 21 al 23. Jesús está hablando a una multitud de sus seguidores y les está enseñando acerca de aquellos que entrarán en el reino de los cielos.
Jesús comienza diciendo: «No todo el que me dice: «Señor, Señor», entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos» (Mateo 7:21). Es importante destacar que Jesús está enfatizando la importancia de hacer la voluntad de Dios, más allá de simplemente creer en él o pronunciar su nombre. Así, Jesús se refiere a aquellos que realizan grandes obras en su nombre, pero que no están verdaderamente conectados con él.
El significado de «Nunca te conocí»
La frase «Nunca te conocí» pronunciada por Jesús implica una falta de relación personal y cercana con él. Jesús no está negando que haya conocido a estas personas en el sentido de tenerles información o saber quiénes son. Más bien, se está refiriendo a la falta de una relación profunda y verdadera basada en la fe y la entrega total a él.
Tal vez te interesa¿Qué religión es el Libro de Urantia?Es importante destacar que Jesús no está hablando de aquellos que nunca han conocido a Dios o nunca han oído hablar de él. Más bien, se dirige a aquellos que profesan conocerlo, pero que no han vivido sus vidas de acuerdo con su palabra y su voluntad.
La importancia de conocer a Jesús
Estas palabras de Jesús resaltan la importancia de conocerlo verdaderamente y tener una relación personal con él. No es suficiente simplemente saber sobre Jesús o hacer obras en su nombre; debemos conocerlo en lo más profundo de nuestro ser y experimentar su amor y gracia en nuestras vidas.
Conocer a Jesús implica una entrega total y una confianza completa en él como el Salvador y Señor de nuestras vidas. Significa caminar en obediencia a su palabra y permitir que el Espíritu Santo guíe y transforme nuestras vidas. Es a través de esta relación personal con Jesús que experimentamos su perdón, su amor incondicional y su salvación.
El rechazo del propósito eterno de Dios
Aquellas personas a las que Jesús dice «Nunca os conocí» han rechazado el propósito eterno de Dios para sus vidas. Han vivido de acuerdo con sus propios deseos y ambiciones en lugar de someterse a la voluntad de Dios. Han elegido seguir su propio camino en lugar de rendirse a Jesús y seguir sus enseñanzas.
Tal vez te interesa¿Qué significa art in heaven en nuestro Padre celestial?Este rechazo del propósito eterno de Dios es una de las razones por las que Jesús dice que no los conoce. Han rechazado la oportunidad de entrar en una relación personal y cercana con él y han optado por vivir separados de él. Han elegido la oscuridad en lugar de la luz y, como resultado, han perdido la oportunidad de experimentar la plenitud de vida que Jesús ofrece.
La elección entre la luz y la oscuridad
En su enseñanza, Jesús deja claro que todos tenemos una elección entre la luz y la oscuridad. Podemos elegir seguir a Jesús y caminar en la luz de su verdad y amor, o podemos optar por seguir nuestro propio camino y vivir en la oscuridad del pecado y la separación de Dios.
La elección entre la luz y la oscuridad tiene graves consecuencias. Aquellos que eligen vivir en la oscuridad y rechazar a Jesús enfrentarán la separación eterna de Dios. Por otro lado, aquellos que eligen caminar en la luz y seguir a Jesús experimentarán su amor, perdón y vida eterna en comunión con él.
La importancia de la fe en Jesús
Un aspecto clave de conocer a Jesús es tener fe en él. Jesús enfatiza que no es suficiente solo creer intelectualmente en él; debemos tener una fe viva y activa que se manifieste en una vida de obediencia y rendición a su voluntad.
Tal vez te interesa¿Qué significa cuando la Biblia dice que Dios se arrepintió?La fe en Jesús implica confiar en él para nuestra salvación y no en nuestras propias obras o méritos. Es reconocer que somos pecadores y que necesitamos su perdón y gracia. Es creer que Jesús murió en la cruz por nuestros pecados y resucitó para darnos vida eterna.
La fe en Jesús nos lleva a confiar en su provisión y a seguir su guía en todas las áreas de nuestra vida. Nos ayuda a vivir con la certeza de su amor y su cuidado por nosotros. Es a través de esta fe en Jesús que podemos experimentar una relación íntima con él y ser verdaderamente conocidos por él.
La condena a una separación eterna
Cuando Jesús dice «Nunca te conocí. Apartaos de mí», está pronunciando una condena a una separación eterna de Dios. Aquellos que rechazan a Jesús y viven separados de él durante su vida terrenal también enfrentarán la separación eterna de su presencia en la vida futura.
La separación eterna de Dios es una consecuencia natural del rechazo de su amor y de su propósito para nuestras vidas. Es una eternidad vivida en la oscuridad y el alejamiento de la fuente de vida y amor.
Sin embargo, es importante destacar que esta condena no es la voluntad de Dios para nosotros. Él nos ama y nos ofrece su salvación a través de Jesús. Pero depende de cada uno de nosotros aceptar o rechazar esta oferta de amor y gracia.
Reflexión sobre las palabras de Jesús
Las palabras de Jesús cuando dice «Nunca te conocí. Apartaos de mí» son palabras fuertes y desafiantes. Nos llaman a examinar nuestra propia relación con él y asegurarnos de que estamos verdaderamente conociéndolo y siguiéndolo.
Es fácil caer en la trampa de creer que nuestras buenas obras o nuestra religiosidad nos aseguran un lugar en el reino de los cielos. Pero Jesús deja claro que lo más importante es conocerlo y tener una relación personal y cercana con él.
Hay que recordar que Jesús no está buscando seguidores religiosos, sino discípulos comprometidos. Él quiere que lo conozcamos, lo amemos y lo sigamos de cerca. Él quiere que vivamos de acuerdo con su palabra y su voluntad, y que permitamos que su Espíritu Santo nos transforme a su imagen.
Conclusiones y aplicaciones para nuestra vida
Las palabras de Jesús cuando dice «Nunca te conocí. Apartaos de mí» nos llaman a examinar nuestra relación con él. Nos recuerdan la importancia de conocerlo verdaderamente y seguirlo con fe y obediencia.
Es crucial que reconozcamos que no es suficiente simplemente saber sobre Jesús o hacer buenas obras en su nombre. Debemos tener una relación personal con él y experimentar su amor y gracia en nuestras vidas.
Esta relación personal con Jesús nos llevará a vivir de acuerdo con su palabra y su voluntad. Nos transformará en discípulos comprometidos que siguen sus enseñanzas y buscan su gloria en todo lo que hacemos.
Así que, en lugar de confiar en nuestras propias obras o en nuestra religiosidad, debemos confiar en Jesús y tener fe en él. Debemos buscar conocerlo cada vez más y permitir que su Espíritu Santo nos guíe y transforme a su imagen.
No esperemos al día del juicio para escuchar las palabras de Jesús diciendo «Nunca te conocí». En lugar de eso, aprovechemos la oportunidad de conocerlo y seguirlo hoy mismo.