La herencia es un tema importante en la Biblia y ha sido objeto de discusión y debate a lo largo de los años. En la sociedad actual, solemos asociar la herencia con la transmisión de bienes materiales de una generación a otra. Sin embargo, en la Biblia, el concepto de herencia va más allá de los bienes terrenales y se centra en la transmisión de la fe y los valores a las generaciones futuras. En este artículo, vamos a explorar lo que dice la Biblia sobre la herencia y el propósito detrás de ella. También vamos a examinar la forma en que la herencia se presenta tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento. Descubriremos qué dice la Biblia sobre dejar bienes a los hijos y cuál debería ser nuestra actitud correcta hacia la herencia. Finalmente, reflexionaremos sobre cómo la herencia puede ser un acto de amor en el contexto cristiano.
¿Qué es la herencia en la Biblia?
En la Biblia, la herencia se refiere al proceso de transmitir bienes y posesiones de una generación a otra. Sin embargo, también se menciona la herencia en un sentido más amplio, que incluye la transmisión de tradiciones, conocimientos y valores a las futuras generaciones. En el Antiguo Testamento, el concepto de herencia está estrechamente relacionado con la promesa de Dios de dar la Tierra Prometida a los israelitas como herencia. Esta promesa se hizo a Abraham y se transmitió a su descendencia.
¿Cuál es el propósito de la herencia en la Biblia?
La herencia en la Biblia tiene como propósito principal asegurar el sustento y la prosperidad de las generaciones futuras. En el Antiguo Testamento, el objetivo era permitir que la familia se estableciera en la Tierra Prometida y disfrutara de las bendiciones de Dios. En el Nuevo Testamento, el propósito de la herencia se traslada del ámbito físico al espiritual. Jesús habla de una herencia eterna que se obtiene a través de la fe en Él y de la relación con Dios. Por lo tanto, el propósito de la herencia en la Biblia es asegurar la continuidad de la fe y los valores cristianos de una generación a otra.
La herencia en el Antiguo Testamento
En el Antiguo Testamento, se mencionan varias leyes y principios relacionados con la herencia. Por ejemplo, en Deuteronomio 21:17, se establece que el hijo primogénito debe recibir una porción doble de la herencia en comparación con los demás hijos. Esto garantizaba que el primogénito tuviera suficientes recursos para mantener a la familia y mantener el legado de la familia. También se menciona la importancia de la herencia de la tierra en el libro de Levítico, donde se establecen leyes sobre la distribución de la tierra entre las tribus de Israel.
Tal vez te interesaHombre divorciado y ser líder religioso según 1 Timoteo 3:2La herencia en el Nuevo Testamento
En el Nuevo Testamento, Jesús habla sobre la herencia espiritual y la importancia de poner nuestra confianza en Dios en lugar de confiar en las riquezas terrenales. En Mateo 6:19-21, Jesús dice: «No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el óxido destruyen, y donde ladrones penetran y roban; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el óxido destruyen, y donde ladrones no penetran ni roban. Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón». Aquí, Jesús nos enseña que debemos valorar más la herencia espiritual y eterna que la herencia material.
¿Qué dice la Biblia sobre dejar bienes a los hijos?
La Biblia tiene algunas enseñanzas claras sobre dejar bienes a los hijos. En primer lugar, se menciona la importancia de proveer para la familia en 1 Timoteo 5:8, que dice: «Pero si alguno no provee para los suyos, y especialmente para los de su casa, ha negado la fe y es peor que un incrédulo». Esto muestra que es nuestra responsabilidad cuidar de nuestros seres queridos y asegurarnos de que tengan lo necesario para vivir. Sin embargo, la Biblia también nos advierte sobre el peligro de aferrarse demasiado a los bienes materiales. En Lucas 12:15, Jesús nos dice: «Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee». Estas enseñanzas nos instan a equilibrar nuestra generosidad y responsabilidad hacia nuestra familia con nuestra devoción a Dios y a los demás.
La importancia de transmitir la fe cristiana a los hijos
Una de las formas más valiosas de herencia que podemos dejar a nuestros hijos es la fe cristiana. Más que cualquier posesión material, la fe en Dios y el conocimiento de la Biblia son fundamentales para su bienestar espiritual y emocional. En Proverbios 22:6, se nos insta a instruir a nuestros hijos en el camino del Señor: «Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él». Esto significa que debemos enseñarles los principios bíblicos y mostrarles el amor de Dios a lo largo de su vida. Dejarles una herencia de fe significa proporcionarles un fundamento sólido para su relación con Dios y ayudarles a crecer en su fe.
La herencia más allá de los bienes materiales
Además de los bienes materiales, la herencia también puede incluir la transmisión de valores, educación y profesión a nuestros hijos. Es importante enseñarles el valor del trabajo duro, la honestidad y la integridad. También debemos guiarles en su educación y ayudarles a descubrir sus dones y talentos. Proverbios 13:22 dice: «El buen hombre deja herencia a los hijos de sus hijos». Esta herencia no se trata solo de bienes materiales, sino de una riqueza que se transmite a través de la sabiduría y las enseñanzas transmitidas de generación en generación.
Tal vez te interesaIglesia verdadera según la Biblia – Descubre la respuesta aquí¿Qué otras cosas se pueden incluir en la herencia según la Biblia?
Aparte de los bienes materiales, la herencia también puede incluir otras cosas importantes según la Biblia. Por ejemplo, en el libro de Proverbios, se menciona repetidamente la importancia de la sabiduría y el conocimiento. Proverbios 4:5-9 dice: «Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; no te olvides ni te apartes de las palabras de mi boca. No la dejes, y ella te guardará; ámala, y ella te preservará. La sabiduría es el principal; adquiere sabiduría; y junto con todo lo que obtengas, adquiere inteligencia. Ensálzala, y ella te ensalzará; te honrará si tú la abrazas. Ella pondrá sobre tu cabeza gracia coronadora; te hará recibir una corona de hermosura». Estas enseñanzas nos muestran que la sabiduría y el conocimiento son un legado valioso que debemos transmitir a nuestros hijos.
¿Cuál es la actitud correcta hacia la herencia?
La actitud correcta hacia la herencia, según la Biblia, es comprender que todo lo que poseemos es un regalo de Dios y debe ser administrado con sabiduría y generosidad. En lugar de aferrarnos a los bienes materiales, debemos aprender a usarlos para bendecir a los demás y para glorificar a Dios. 1 Timoteo 6:17-19 nos dice: «A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna».
Conclusiones: La herencia como acto de amor en la Biblia
La herencia en la Biblia va más allá de los bienes materiales y se centra en la transmisión de la fe y los valores a las generaciones futuras. Aunque es importante proveer para nuestra familia y cuidar de ellos, debemos recordar que nuestro verdadero tesoro está en el cielo y no en las cosas terrenales. La herencia más valiosa que podemos dejar a nuestros hijos es la fe en Dios y el conocimiento de su Palabra. También podemos incluir la transmisión de valores, educación y profesión. La herencia debe ser un acto de amor y generosidad, y debemos administrar los bienes que tenemos con sabiduría y dedicarlos a servir a Dios y a los demás.
Tal vez te interesaInternational House of Prayer (IHOP): Todo lo que necesitas saber